"aerogenerador sin aspas" (... soluciones limpias y eficientes)









Se espera producir la primera unidad en 2016 con apoyo de Repsol y 12 inversores , generando electricidad al pasar el aire por un cono y mover el mástil. (2014)

Las grandes extensiones de terreno plagadas de molinos eólicos con grandes aspas pueden tener fecha de caducidad si sale adelante el proyecto en el que desde hace tres años trabaja un grupo de siete personas, para diseñar un aerogenerador sin aspas. Realizará las mismas funciones que uno convencional, pero con un ahorro considerable de costes, ya que tanto su mantenimiento como su instalación resultan mucho más baratos. Además, reduce el impacto medioambiental y elimina el ruido.

Todas estas ventajas son destacadas por el ingeniero David Yáñez, involucrado en esta aventura junto a otros cinco compañeros más que trabajan entre Ávila y el Centro Tecnológico de Repsol en Móstoles (Madrid). Los otros dos socios mayoritarios impulsores del proyecto son Raúl Martín y David Suriol.

En Ávila tienen un pequeño túnel de viento en el que testan los prototipos y prueban en el cercano municipio de Gotarrendura, cuyo alcalde, Fernando Martín, es un convencido de las energías limpias.


Realizan la misma función que el convencional pero con ahorro de costes, sin tanto impacto ambiental y sin generar ruido

Este ingeniero industrial de la Universidad de Valladolid deja claro desde el primer momento que el «fin último» consiste en «competir con la energía eólica tradicional» a partir de un proyecto pionero que puede suponer un ahorro medio de en torno a 50%.

Pese a que la función es la misma que la de los molinos con aspas, la metodología es totalmente distinta, ya que los nuevos 'molinos' parten de una estructura cónica de unos 12,5 metros de alto, que absorbe la energía del viento a partir de los remolinos que ella misma genera con la acción del aire cuando la hace vibrar.

Para explicarlo gráficamente, sería algo parecido a la acción del viento sobre una persona con melena. Las ondulaciones del pelo serían los remolinos o vórtices de Von Karman que genera el viento tras acariciar la cara, que sería la que absorbería la energía generada por la oscilación, en este caso, del mástil.




Se trata de un efecto que en ocasiones ha provocado graves problemas en grandes obras de ingeniería como el puente estadounidense de «Tacoma Narrows», que se vino abajo en 1940 tras un colapso estructural provocado por la confluencia de la frecuencia natural de la oscilación del puente y la de los remolinos.

Lo que en aquella ocasión fue un problema, en este caso ha sido aprovechado para este salto tecnológico que pretende absorber la energía del aire a partir de una estructura que consta de una especie de mástil que comenzó teniendo el aspecto de un bate de béisbol y ahora parece más estilizado con una forma más cónica. Su ventaja sobre los aerogeneradores actuales consiste en que «absorbe mejor la energía» y no necesita ser orientado porque «siempre lo está». Una vez diseñado un dispositivo «lo suficientemente bueno» para el fin que se busca, llegó el momento de centrarse en «cómo variar la frecuencia de oscilación» del mástil «en función de la velocidad del viento».

Dado que el sistema no tiene ni engranajes, ni rodamientos, ni elementos mecánicos que propicien un desgaste como consecuencia del rozamiento, los ingenieros consiguieron un pequeño dispositivo situado de la mitad para abajo del prototipo, cuyo funcionamiento se basa fundamentalmente en la acción de los imanes.



De esta manera se cuenta con un mecanismo que se ajusta de manera natural a la velocidad del viento, no produce desgaste en la estructura y produce un ahorro de los 300 litros de aceite que cada año necesita un aerogenerador tradicional.

Este proyecto de aerogenerador, que «no puede ser más simple» según David Yáñez, se encuentra inmerso en su tercera y definitiva fase, de manera que a principios de 2016 pueda estar lista la primera unidad de molino eólico sin aspas, gracias al apoyo inicial de Repsol y en la actualidad de doce inversores privados. Las pruebas finales podrían ser realizadas en Soria, antes de que estos nuevos 'molinos' salgan al mercado con un coste aproximado de 5.500 euros.


La energía eólica es una solución limpia y eficiente para la generación eléctrica, aunque genera ciertos inconvenientes para el medio ambiente. Este inconveniente lo ocasionan las hélices, tanto acústica como visualmente, aunque el impacto más importante es el producido sobre la avifauna.




Estos nuevos diseños de aerogeneradores “sin aspas” están siendo probados por varios investigadores, como la empresa Vortex Bladeless, que lo fabrica en fibra de carbono y consigue generar electricidad gracias a ese efecto físico que se produce cuando el viento choca contra la estructura del aerogenerador. Se producen unos remolinos alrededor de la estructura que hacen que el equipo comience a oscilar y así genera energía mecánica. Gracias al aprovechamiento de la inducción electromagnética producida, se crea energía eléctrica.

Ventajas de estos aerogeneradores respecto a los convencionales
Ocupan menos superficie, por lo que las extensiones de parques eólicos pueden verse reducidas.
Las aves no corren peligro por volar a su alrededor.
Se reduce el impacto paisajístico.
Se reduce considerablemente el ruido producido, por tanto, se pueden instalar más cerca de los núcleos de consumo, con la reducción de pérdidas por transporte que esto conlleva. Esto hace, además, que se pueda desarrollar la minieólica, tecnología que hasta ahora había tenido muchas dificultades para salir adelante.
Su construcción es mucho más económica, además un aerogenerador Vortex Bladeless es un 53% más barato que uno convencional, los costes operacionales se reducen un 51% y los costes de mantenimiento un 80%.
No genera ningún tipo de residuo de lubricantes por no tener engranajes.
Se calcula que reduce la huella de carbono en un 40%.
Son ideales para las plantas offshore por sus características de simplicidad de instalación y mantenimiento.

El único inconveniente de esta nueva tecnología es que producen un 30% menos energía que un aerogenerador tradicional.





Esta empresa española, fundada en 2013, comenzó el desarrollo de su proyecto Vortex Bladeless con un crowdfunding para dar a conocer esta tecnología. La primera instalación piloto que pretenden emprender es una combinación con energía solar para dar electricidad a hogares en la India. Posteriormente quieren desarrollar tecnologías competitivas capaces de generar 4 kW por aerogenerador. El objetivo es llegar a construir aerogeneradores de 1MW capaces de dar electricidad a 400 viviendas.

Además, se ha tenido en cuenta como tecnología innovadora con grandes expectativas de formar parte del proyecto ESPHERA, para la integración de energías renovables en las autopistas.

Aunque muchos fabricantes están interesados en su tecnología, ellos siguen trabajando en mejorar la calidad del diseño y recaudando dinero para su aventura piloto.

Es posible que el aerogenerador “sin aspas” revolucionará el mundo de la energía eólica. Habrá que esperar a ver el comportamiento del mercado, pero lo que es seguro es que la ecología del planeta está de enhorabuena. 09/06/2016

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... para continuar ahondando un poco más en las "renovables"

os invito a consultar los distintos aspectos
expuestos en los apartados siguientes:




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